Caminé, sabía que me seguiría, no importaba lo que hiciera el siempre estaba ahí.
Le pregunte que por que lo hacía, no hubo replica. Comencé a desesperar y a exaltarme, las preguntas era clara y concisa ¿Por qué? , no había respuesta alguna.
Termine por desaparecer de su vista, el pensamiento me abrumaba, ¿Qué le daba tanta envidia? Y si así fuera, ¿por qué no me lo hacía saber?, aunque yo muy en el fondo lo sabía perfectamente, el tiene todo y nada que ver en esto que me sucede.
¿Qué es lo que te causa tanta repulsión de mi persona? ¿Cuál es la razón de hacerme sentir así? ¿Qué clase de humor torcido tienes como para reír al verme caer? , si, eso es lo que le preguntaría la próxima vez que lo encuentre.
Fui al baño y ahí estaba, no me pude contener y le grite, me sentía desesperado. -¿Qué te pasa? ¿Por qué a mí?, Una vez más no hubo respuesta audible, pero inconscientemente ya la sabia.
Yo sabía que el universo te muestra señales sutiles que debes aprender a interpretar y que cuando no lo haces te llama a la puerta con un martillo.
Pero que más da, lo hecho, así, hecho está. Aunque alguien debe pagar por todo esto, el sufrimiento de todos los que te rodean, alguien.
Instintivamente tome lo primero que encontré y lo arrojé con todas mis fuerzas y mi rencor y mi angustia y mis pesadillas y enojo.
Y así su imagen se desvaneció y mi furia apaciguo un poco, pero el espejo estaba roto.
Siempre lo supe y no quería aceptarlo. Maldito Yo
3 comentarios:
Me molesta no tener que agacharme para verme la cara en el espejo. Ash.
Pero no me maldigo
Yo no me maldigo porque soy muy guapo, jeje.
yo raras veces me veo en el espejo..pfff..
me gusto lo del post pasado del gusanito jajaja
saludos :)
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